Cada uno de nosotros respiramos, nos movemos y tenemos posturas que a lo largo de nuestra vida nos han ayudado a adaptarnos al entorno y protegernos de situaciones de miedo, conflicto y falta de amor. Todas nuestras vivencias conforman nuestra estructura corporal.
Conciencia Corporal
El trabajo de conciencia corporal nos permite:
- ablandar la estructura y coraza muscular en la que se manifiestan las defensas y resistencias que hemos ido creando a lo largo de la vida para no vivir la angustia ante determinadas situaciones dolorosas.
- Recuperar nuestra energía vital y favorecer que esta fluya a través del cuerpo.
- Conectar con el bienestar físico y emocional, deshaciendo nudos, reduciendo el estrés, la ansiedad y otras tensiones cotidianas.
- Estar más presentes reconociendo nuestras necesidades.
- Recuperar la autoestima, espontaneidad y libertad de expresión.
¿Cómo es?
A través de ejercicios sencillos proponemos una escucha y exploración corporal para reconocer lo que nos sucede internamente.
Utilizamos herramientas como la respiración, la danza guiada y el movimiento libre, la expresión, la voz, el juego, el masaje y la meditación.